¿Quién se atreve a entrar? [libre]

Me puse en posición de defensa a su lado. Mientras el armario se abría lentamente le agarré fuerte el hombro con la mano que tenía libre. Tenía miedo, miedo de verla, de verla a ella convertida en mi boggart, ¿qué tal si no me podía enfrentar a ella, que solo era un boggart? Entonces no me podría enfrentar nunca a la real.
La puerta se terminó de abrir, miré el suelo y luego a las dos formas, sí, había dos: una cosa el boggart de Cris y otra con el mío. Tomé aire mientras sentía sus pasos y la miré de abajo a arriba: era Bellatrix Lestrange en forma de boggart, la asesina de mi padre estaba allí parada. La memoria del asesinato me volvió a la mente, traté de ahuyentarla pero no pude. Cerré los ojos con fuerza, los abrí y pronuncié: Riddikulus y se deshizo en polvo.
Miré a Cristian, que había hecho lo suyo mientras yo luchaba, podía sentir mis ojos húmedos pero no iba a llorar, estaba segura. Me dejé caer en el suelo, de rodillas.

Luego de que yo me arrodillara, lo mire a él y a su boggart: era un niño, practicamente un bebé todo ensangrentado. No entendía muy bien el por qué pero deduje que seguramente sería un ser querido para él.
Miré a mi costado y allí estaba él, lo alcancé a ver llorar antes de que girara la cabeza avergonzado. Dejé la varita en el suelo, miré el juguete que daba vueltas en el suelo y el polvo que allí estaban y de repente desaparecieron por el armario. Me puse enfrente de él, me senté con las piernas cruzadas y lo miré. De repente sentí algo en mis mejillas: yo también estaba llorando pero esta vez no me sequé las lágrimas. Solo las ahuyenté y eso trajo más y más pero lo miré y le dije:
-No te sientas avergonzado. Yo también estoy así-le dije sin saber qué decir.

Lancé un suspiro de relajación y consuelo cuando acercó su mano a mí. aunque nada en el mundo podía consolar el haber visto como boggart a Bellatrix Lestrange, porque ella había matado a mi padre enfrente mío cuando yo apenas era una bebé...y siete años después nos habían mandado su cadáver, y yo había sido la primera en verlo...Esas eran cosas que nunca iba a olvidar.
¿Que lo rebaja de nivel? ¿Qué clase de familia era esa? Seguro eran Slytherin´s o algo parecido. Muy segura estaba de eso.
-Hasta la persona más amarga puede y debe llorar.-le dije

Tomé aire, suspiré nunca le había dicho esto a nadie, siempre me cambiaba de tema cuando me preguntaban sobre mis padres, especialmente sobre mi padre. Casi nunca hablaba de él por miedo a que nos hagan algo otra vez.
-Cuando yo tenía 1 año, con mis padres y mi hermano vivíamos en el Valle de Godric. Mis padres pertenecían a la Orden del Fénix y sabían que los mortífagos los buscaban pero como nosotros éramos muy pequeños no nos dijeron nada. Una noche ellos entraron, no recuerdo muy bien quiénes eran pero sí recuerdo a Lucius Malfoy y a...Bellatrix Lestrange-tomé una pausa y volví a hablar-Ella me agarró y me amenazó con varios Cruciatus, también me golpeó con una daga varias veces para que mi padre confiese pero él no quería hacerlo. Decía que no sabía dónde estaban los Potter y era verdad, hacía tiempo que no se comunicaban. Pero ella no le creyó y ... -empecé a temblar pero no de frío-se lo llevó. No supimos de él pero yo sí, yo creo que lo vi alguna vez. Dime loca pero...a veces tenía visiones de él y lo que le ocurría. Pasaron 8 años y...un día nos trajeron el ... cadaver de mi padre. Lo enterraron en el jardín de casa, pero yo no...no recuerdo mucho de él.
Me largué a llorar, no podía más, nunca se lo había contado a nadie y ahora que lo hacía descubría cuánto mal me había hecho esa mujer. Todavía podía recordar la última vez que había visto a mi padre, sus ojos sobre mí diciendome que todo iba a estar bien...¿cómo olvidar todo eso?

Cuando me abrazó, suspiré y me relajé mientras quitaba las lágrimas de mi rostro. Por un momento pensé que tenía razón: yo apenas lo conocía, apenas sabía de su vida y yo ya le estaba contando todo sobre la mía y para colmo me ponía a llorar delante de él. Yo sí era rara.
Asentí con la cabeza y sonreí mirándolo. El sí era un buen amigo, me caía bien.
-No sabes todo lo que tuve que soportar-suspiré de nuevo. Las locuras de mi madre, la depresión mía, la histeria de mi hermano, la obsesión de mamá por empezar una "nueva vida" pero sin olvidar...eran muchas cosas-Pero tengo miedo...de que ella me atrape, porque dijo que iba a venir por mí. Y por eso tengo miedo. No quiero que eso pase.

Sonreí. De alguna extraña manera me hacía sentir mucho mejor de lo que estaba. Alcé la mirada y la cabeza y lo miré.
-Espero que eso no pase nunca. Espero que por lo menos haga una excepción-dije aunque ni yo creía eso.-¿Por qué te cambiaste de escuela?

Asentí con la cabeza. Era muy parecido a mi hermano en ese aspecto, él siempre se metía en problemas pero por lo general tenía muy buenas notas.
-Entones querías una nueva vida-dije sonriendo y diciendo con toda la razón-¿O me equivoco?

-No para nada, es totalmente cierto, queria alejarme de todo eso...empezar aqui...- Le dije sonriendo tranquilamente, aunquepor dentro me odiaba por haber mentido pero si le decia la verdad se alejaria y se lo contaria a todo el mundo

Noté cierta inseguridad en su voz, como si no estuviera muy seguro de sus propias palabras. Lo dejé pasar ya que quizás no quería contarme algo, igual lo respetaba porque yo era una mandada.
Suspiré, el Boggart del armario no se movía más, ya había tenido suficiente con todo eso.
-Empezar una nueva vida a veces es lo mejor-dije recordando lo que mi madre había tenido que hacer.