Capitulo 4:Siempre igualAria salió del baño sabiendo que estabamos fuera,nos esquivó con habilididad y se dirigió al retrato de la Dama Gorda sin levantar la cabeza del suelo.Andaba por lo corredores como si fuese sonambula hasta que un chico rubio y de brillantes ojos azules la cogió por dejado de los codos aguantando su peso.
-Aria...-La llamó con suavidad bajo la atenta mirada de un frupito de tres chicas Slytherin que mas que mirarlos fulminaban.
La morena levantó la cabeza y fijó sus ojos en el.Sonrió lentamente-Oliver...-Saludó al Ravenclaw mas popular de todo el colegio con sequedad.-¿Que paso?-Preguntó con insistencia al chico
-Nada...-El solo la iluminaba con una sonrisa cegadora-Solo tenia miedo que te estamparas con cualquier cosa.
-Aaaamm...pues por eso no te preocupes...-enarco una elegante ceja con sorna-Puedo cuidarme sin que tu me mimes,ademas por eso me estoy ganando una mirada ametralladora de las tres hermanas yo-soy-pura-y-tu-no.
El giro la cabeza con resignacion y suspiro,pero cuando cuando se volvió para saguir hablando,Aria se habia escurrido entre sus brazos y marchaba tan tranquila por el pasillo.Buuuuff...que chica penso continuando su camino.
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Lily corría a toda velocidad por el primer piso y justo entró cuando la profesora de transformaciones cerraba la puerta.Se sentó al lado de Aria que ahora sonreía como siempre.La lanzó una mirada de alegría muy propia en ella.La profesora McGonagall empezó con su clase de transformar monedas de oro en figuras de animales animadas.
-Señorita Turnner el director quería verla en su despacho según empezara la clase.-Anunció la profesora antes de empezar la lección.
Lily giró la cabeza con la suficiente rapidez para ver a Aria suspirar con resignación mientras se levantaba y cargaba la mochila que ni siquiera había abierto como si supiera que no la iba a necesitar y se escurria sin dificultad por la puerta de la clase bajo la atenta mirada de la profesora.
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Aria se dirigía ala gargola con la cabeza gacha hasta que choco con otra persona,levanto la mirada y lo primero que vió fueron unos ojos grises mirandola fijamente.
-Deberias mirar por donde vas Black-susurro con la mirada fija en el oceano gris de sus ojos.
-Mira...quien fue a hablar-Repuso el sin subir el tono y sin interrumpir el contacto visual.
Plata contra oro que se fundian en los ojos del otro.
-¿No deberias estar en clase?-Preguntó
-En realidad no...-respondió con un leve movimiento de cabeza que hizo interrumpir la conexion unos segundos.
Sirius enarco una ceja divertido-Y entonces...¿Donde...?-No le dió tiempo a terminar ya que un ligero carraspeo del otro del pasillo interrumpió la breve charla que mantenían los dos Gryffindor.
-Los alumnos tendrían que estar en clase, lo sabes de sobra Black-Anunció una clara voz a la espalda de Sirius que con su tamaño y lo pequeña que era Aria conseguia que solo se le viese a el.-Black vete a clase antes de que informe a algun profesor.
Aria rió cantarinamente y se desplagó hacia un lado quedando dentro del campo de visión del prefecto de Ravenclaw.
-Hola Oliver...otra vez-Saludó al rubio caminando hacia el.El chico tenía una cara de inseguridad tremenda-No seas muy duro con el ¿vale?
Acto seguido siguio caminando hasta una estatua de un aguila de oro.
-Espuma de azucar-Dijo con tranquilidad y subió hasta la puerta del despacho.
-Adelante-Se adelanto la voz del director antes de que pudiese tocar la puerta.
-Ariadna,me alegra que haya recibido mi mensaje
A partir de aquí no lo tengo escrito así que no se cuanto tardaré en poner